¿Qué es una pila de lavadero?
Aunque sea un producto poco conocido, la pila lavadero sigue siendo muy utilizada hoy en día. Versátil, higiénica y efectiva, te permitirá lavar a mano cualquier prenda que necesites, rápidamente, y cuidar de tu ropa delicada para que te dure más tiempo.
Qué es una pila de lavar
Una pila de lavar o pila lavadero es un recipiente cóncavo, normalmente de piedra, en el que se vierte agua para lavar objetos como platos o ropa.
Desde que se inventó la lavadora, las pilas lavadero para lavar la ropa son cada vez menos frecuentes. Pero ¿quién no ha lavado alguna prenda a mano porque la necesita urgentemente, es de color o demasiado delicada para lavarla en la lavadora?
Si tú también lavas alguna prenda a mano y quieres obtener buenos resultados, has de utilizar un jabón adecuado y una pila indicada a lavar. Estas pilas suelen tener una superficie rugosa, específicamente diseñada para escurrir la ropa, de manera que eliminamos la suciedad eficazmente sin desgastar la tela.
Para qué sirve una pila lavadero
Antes de hablarte de su historia, te va a sorprender para todo lo que se utiliza la pila de lavar hoy en día:
– Lavar óptimamente la ropa. Como hemos señalado, te permite lavar específicamente ropa delicada, de color o cuando la necesitas rápidamente.
– Lavar otros enseres. Claro que puedes utilizarla para limpiar los platos, lavarte las manos o cualquier objeto que necesites. Por eso es tan frecuente ver estos lavaderos en los exteriores de las casas, disimulados en el jardín o en las terrazas. Prácticas para lavar la ropa día a día, te pueden sacar también de algún apuro al preparar una barbacoa o cualquier comida en exteriores, llenar un cubo de agua, lavarte las manos antes de entrar en casa, quitarte la arena al llegar de la playa o la tierra si vienes del campo, etcétera. ¡Te sorprenderá lo limpia que puede estar tu casa gracias a este sencillo objeto!
– La pila de lavar también es útil en interiores. Existen modelos prácticos y decorativos que incluyen también un armario donde guardar tus útiles de limpieza, con el fin de protegerlos del calor y la luz solar. Además, las pilas actuales son tan compactas que te permitirán tener un extra de higiene sin sacrificar el espacio.
– Si se estropea la lavadora. Evitará que este imprevisto altere toda tu rutina diaria cuando necesitas tener tus prendas limpias. Así, antes de apresurarte a llamar a un técnico, podrás lavar tu ropa cómodamente y tener a mano la ropa limpia que necesites. En un lavadero puedes incluso lavar prendas grandes como sábanas. Su escurridor te facilitará este proceso, tardarás menos que con la lavadora y habrás consumido menos electricidad.
– Lavar el calzado y otras prendas aparatosas. Hay muchas cosas que no nos atrevemos a meter en la lavadora o que resultan grandes y aparatosas. No renuncies a tener estas prendas limpias y lávalas con higiene y seguridad en una pila lavadero. Pensamos que es un detalle sin importancia, pero ¿cuántas veces es necesario tener zapatos limpios, mochilas limpias, etc.? ¡Continuamente!
– Optar por un lavado sencillo, económico y natural. Si te importa el medioambiente, una pila lavadero es una inversión que realmente te interesa. Cada vez más personas están concienciadas en volver a un estilo de vida sencillo y natural, desean desintoxicarse de tantos electrodomésticos y practicar deporte en casa en vez de pagar un caro gimnasio. Te proponemos volver a una rutina tan sencilla y sana como lavar más la ropa a mano, como hacían nuestros abuelos. Porque:
– Al lavar a mano ahorrarás electricidad.
– Tu ropa durará más tiempo, de manera que evitarás el desperdicio.
– Lavar la ropa a mano es un divertido y sano ejercicio que puedes practicar una vez a la semana (o cuando lo necesites) solo o acompañado.
– Te permite utilizar más productos naturales que no dañan la ropa.
– Una pila lavadero te durará para siempre. ¿Obsolescencia programada? ¡Eso sí que ha pasado a la historia!
– Puede ser un complemento decorativo. En las casas de campo o casas rústicas, la pila lavadero es un complemento casi necesario. Existen pilas de lavar antiguas o tradicionales, hechas de piedra, con apariencias muy distintas para que escojas la que mejor vaya con tu casa y presumas de una vivienda rústica integral.
¿Dónde se suelen instalar las pilas de lavar?
Estas pilas se pueden colocar tanto en interiores como en exteriores. Todo depende del tipo de lavadero que sea.
Por ejemplo, si tu pila es de piedra u hormigón, lo mejor es empotrarla en una encimera (de granito o del material que prefieras) y así tendrás un soporte firme, algo que interesa sobre todo en exteriores. Con esto tendrás una combinación útil y resistente al clima de exterior.
En interiores es muy frecuente empotrar un lavadero de cerámica, que es más delicado, pero muy higiénico y decorativo.
¿No cuentas con un lugar como una encimera para fijar el lavadero? No te preocupes, en el mercado actual existen lavaderos con el mueble incluido, algo muy práctico y que incluso podrás mover de lugar si necesitas hacer una reforma o mudanza.
Historia de las pilas de lavar
Antiguamente no había agua corriente en las casas, por la que se tenían lavaderos públicos donde las mujeres acudían a lavar la ropa. Muchos de ellos se han conservado como monumentos históricos de pueblos o ciudades: puedes visitarlos e imaginar cómo sería la vida entonces… Estos lavaderos se presentan con modelos de construcción y sistemas de abastecimiento de aguas muy diversos.
Pero, hasta el siglo XX, en la mayoría de regiones no existían estas instalaciones específicas para lavar la ropa y las personas limpiaban sobre una tabla y piedras en las orillas de un río o acequia. Se utilizaban jabones, pero a la hora de frotar la ropa para limpiarla bien se recurría a las piedras. En la época, existían las tablas de lavado, que eran piezas de madera con relieves o corrugaciones. ¿Para qué sirve esta tabla de lavado? Las mujeres la llevaban consigo al arrollo o acequia para frotar la ropa. Existen tablas de lavar muy variadas, también de metal o incluso de vidrio.
Las pilas de lavar actuales cuentan con una parte con relieve para escurrir la ropa de esta manera. Verás que resulta muy efectivo frotar la ropa enjabonada con ellas, especialmente para manchas localizadas. ¡Comprenderás por qué en el pasado fue tan importante tener una tabla de lavado!
En muchas regiones encontramos también el pilón, unos recipientes grandes de piedra, también de uso público o para toda una finca, que podían tener usos muy diversos, incluso el de abrevadero o bebedero. A veces, tenían asimismo un techo para proteger de la lluvia o el sol excesivo. El agua sobrante a menudo iba canalizada y se destinaba a otros usos o volvía a desviarse al lavadero.
Como ves, históricamente no existían pilas específicas para cada actividad. Hoy en día tenemos una pila para el cuarto de baño, otra para lavar los platos y otra para la ropa. Y frecuentemente no utilizamos su agua para beber.
Con la introducción del agua corriente en las casas, muchas comenzaron a disfrutar de su propio lavadero privado, normalmente instalado en el patio de la casa o en el sótano. Son las pilas de lavar: receptáculos con un banco y generalmente hechos de madera o piedra, donde se colocaban las artesas, artesones o barreños en los que se fregaban los platos.
Es muy curioso observar también la evolución de los materiales. Una pila de lavar puede estar fabricada de materiales tan diversos como piedra, madera, cobre, mármol, granito, cemento, esmalte sobre acero o hierro fundido, acero inoxidable, compuestos cerámicos y fibra de vidrio.
¿Para qué se utilizaban las pilas de lavar antiguamente?
Al inicio ya viste para todo lo que nos puede servir una pileta hoy en día. Pues bien, ¡antiguamente no se utilizaba para mucho más! Eso sí, sus diseños eran diferentes en distintas partes de España. Aquí te decimos los usos que se le conocen según nos contaron nuestros antepasados:
– Lavar la ropa. Entonces, generalmente eran de cerámica o piedra y tenían una capacidad muy elevada, para poder colocar piezas grandes como sábanas o mantas. Tenían un adyacente rugoso, como muchas que observamos hoy en día, para frotar la ropa y escurrir el líquido.
– Lavar la vajilla y los utensilios de cocina. En fotos antiguas podemos ver que eran de forma muy similar a los actuales fregaderos de cocina, más pequeños que los utilizados para lavar la ropa (seguimos lavando la misma cantidad de enseres de cocina y del mismo tamaño en ellos). Eso sí, antes solían ser de piedra, mientras ahora lo más frecuente es que sean de metal.
– Pileta de baño. Dentro del dormitorio, las casas solían tener una pileta de baño que consistía en una especie de palangana de cerámica o metal laminado soportada por mueble de madera o metal. Solían acompañarse de una jarra o jarrón de agua y a veces también tenían un soporte para poner la pastilla de jabón.
¿Verdad que es útil contar con una pila lavadero? Sigue leyendo nuestra información sobre estos prácticos accesorios para descubrir si son idóneos para tu hogar.